Los premios IGNobel los concede anualmente la revista Annals of Improbable Research a afirmaciones científicas o pseudocientíficas que resultan chuscas, inverosímiles o simplemente absurdas.

La propuesta, que el colectivo Distrito Forestal ha iniciado, para que se le otorgue al Ministerio para la Transición Ecológica, es porque ha declarado al pino piñonero (Pinus pinea L.), al resinero (Pinus pinaster Ait) y al pino carrasco (Pinus halepensis Mill) como especies exóticas invasoras de los sistemas dunares.

Estas tres especies de pinos son las más características de la flora de los ecosistemas mediterráneos occidentales. El pino piñonero tiene su hábitat natural en todos los países ribereños del Mediterráneo, y el pino resinero y el carrasco tienen su hábitat natural en Francia, Portugal, Italia, Argelia, Marruecos y España, país este último, donde existen las mayores superficies de bosques naturales de las tres especies.

Sobre dunas hay bosques naturales de estas especies en el interior de la Península Ibérica, en la provincia de Valladolid, fijando las dunas continentales, y en el litoral andaluz. Estas dunas están estabilizadas gracias al sistema radical de los pinos lo que evita daños a infraestructuras humanas y cultivos. Los valores ecológicos de estos pinares fueron reconocidos al ser incluidos en la Red Natura 2000, como hábitat prioritario: “Dunas con bosques de Pinus pinea y/o Pinus pinaster”, que incluye Dunas estabilizadas del interior del sistema dunar, cubiertas con vegetación madura dominada por pinos, a menudo procedente de repoblaciones antiguas.

Estos pinos son las únicas especies arbóreas españolas capaces de formar bosque sobre las superficies arenosas de las dunas. Por eso se usaron para fijar las dunas móviles, volantes, hace más de 100 años en Guardamar y el golfo de Rosas, donde eran endémicos los daños que hacían las arenas en caminos, campos, acequias y cultivos.

Sin embargo el Ministerio para la Transición Ecológica las ha declarado especies exóticas invasoras de los sistemas dunares con el argumento de que son invasoras pues sus semillas germinan y las plantas se desarrollan de una manera natural sobre la arenas de las dunas. Puesto que toda planta silvestre germina y se desarrolla de modo natural sin intervención humana, este argumento se puede aplicar a cualquier planta silvestre llegando a la absurda conclusión de que toda la vegetación del mundo, que no haya plantado el hombre, es exótica e invasora.

El Ministerio para la Transición Ecológica sugiere que lo que se puede hacer con los bosques de pinos que viven sobre las dunas es talarlos y arrancar mediante maquinaria sus raíces. La consecuencia sería que las dunas dejarían de estar estabilizadas y volverían a ser móviles y poder causar daños.

Para más información ver el siguiente enlace:

https://distritoforestal.es/actualidad/actualidad-y-noticias/gran-descubrimiento-cientifico-los-pinos-p-halepensis-p-pinea-y-p-pinaster-son-especies-exoticas-invasoras
Ante esta situación el colectivo Distrito Forestal propone la candidatura del Ministerio para la Transición Ecológica para que le sea concedido el premio IGNobel. Por los siguientes motivos:

1º.- Por descubrir que las tres especies de pinos más características de los ecosistemas en los países ribereños del Mediterráneo son especies exóticas invasoras en España.

2º.- Por descubrir que si una especie vegetal semilla, germina y se desarrolla espontaneamente, eso no significa que pueda ser que forme parte de la vegetación natural, sino que es una prueba suficiente para calificarla como especie exótica invasora.

3º.- Por proponer que en las dunas estabilizadas por las raíces de los bosques de pinares lo mejor es talar los pinos y arrancar las raíces con maquinaria.

Por todo ello solicito su firma para que le sea concedido el premio IGNobel al Ministerio para la Transición Ecológica de España.