Los jefes de Estado y de Gobierno que asistieron a la II Cumbre de la denominada Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) realizada en La Habana, han sido desleales con los pueblos que representan y han traicionado los principios fundamentales de la Carta Democrática Interamericana que obliga a todos los Estados de América Latina y del Caribe.

Esta solemne Carta firmada en Lima establece que “la promoción y protección de los derechos humanos es condición fundamental para la existencia de una sociedad democrática”, y que “los pueblos de América tienen derecho a la democracia y sus gobiernos la obligación de promoverla y defenderla”.  La CELAC ha vulnerado estos principios fundamentales, al enunciar como un supuesto derecho de los Estados el de “escoger su forma de organización política y económica”, ignorando que este acuerdo legitima a las dictaduras y los comportamientos antidemocráticos que se practican en la región.

La concurrencia de los Jefes de Estado y de Gobierno a La Habana, ausente de todo cuestionamiento al régimen imperante en Cuba, ha servido para encubrir la dictadura que tiraniza al pueblo de Cuba por más de medio siglo, ignorando sus atropellos contra el derecho a la libertad de todos los cubanos y obsequiando un triunfo diplomático a la dinastía comunista de los hermanos Castro.  También está sirviendo para justificar la violenta agresión del gobierno de Maduro contra el pueblo venezolano por ejercer su derecho a la protesta contra la supresión sistemática de sus libertades y garantías democráticas.

Los actos internacionales que denunciamos ofenden la vocación y los sentimientos democráticos de los peruanos y de la inmensa mayoría de latinoamericanos y caribeños que han quedado desguarnecidos frente a las manipulaciones políticas y antidemocráticas de los gobiernos que quieren perpetuarse en el poder.

Los ciudadanos que adherimos a este pronunciamiento exigimos que los gobiernos auténticamente democráticos de la región retiren su respaldo a la primera frase del punto 1 de la Declaración de la Cumbre de la CELAC en La Habana; y hacemos un urgente llamado para que promuevan una enérgica declaración de la CELAC condenando la dictadura castrista y la violencia sistemática del gobierno de Nicolás Maduro contra la democracia y las libertades fundamentales del pueblo de Venezuela.